El cántabro Román Ramos participó el fin de semana pasado en unas tandas organizadas por un promotor privado en el Circuito de Jerez.

Junto a algunos pilotos más del Campeonato del Mundo de Superbike y Superport, el piloto del Kawasaki Go Eleven tuvo su primera toma de contacto con la moto con la que disputará el WorldSBK esta temporada, siendo sus únicas jornadas de pruebas antes de viajar hasta Australia el próximo mes de febrero, donde realizará otro test previo al inicio del campeonato en Phillip Island.

Al término de los test, Ramos comentaba sus sensaciones al portal oficial del WorldSBK.

¿Cómo ha sido la reanudación de los preparativos de la nueva temporada y qué sensaciones has tenido con tu Kawasaki?

-Tenía muchas ganas de volver a subir a la moto y la verdad es que me divertí bastante. Las sensaciones fueron buenas. El primer día hizo bastante frío, pero no llovió, pudimos rodar en seco y fue bastante bien. El sábado no paró de llover y sólo pudimos rodar un poco por la mañana. El domingo decidimos ya rodar en agua y tuve muy buenas sensaciones con la pista mojada, hacía tiempo que no tenía un feeling así en mojado.

-En cambio, parece que no estarás en los tests oficiales de Jerez y Portimao…

-Sí, sólo haremos este test y el de Australia. Me hubiera gustado estar con todos los equipos de Superbike en Jerez, pero no ha sido posible, así que teníamos que sacar todo el partido y probar cosas en este test y así lo hemos hecho. Hemos probado un embrague nuevo que ha ido un poco mejor, y nos hemos quedado sin poder probar un basculante y algún componente más de la parte delantera, por culpa de la lluvia. Aun así, estoy contento, sobre todo por las sensaciones en agua, y ahora a esperar al test de Australia. Allí esperamos contar ya con las piezas que debemos probar para acabar de configurar la moto y ajustarla a los cambios que se han hecho en el reglamento.

-¿En qué medida os afecta la nueva reglamentación? ¿Crees que como equipo privado os va a beneficiar?

-A nosotros no nos va a perjudicar para nada, al contrario.  Los ajustes que hemos de hacer son de motor. Hemos comprado las piezas que llevaban los pilotos de fábrica y las probaremos directamente en el test de Phillip Island y espero que vayan un poco mejor, al menos es lo que pinta sobre el papel.

Por lo que respecta a las revoluciones, a los pilotos oficiales se las han bajado, pero nosotros aún no llegábamos a esas vueltas, o sea que creo que nos va a ir mejor y que tendremos un poco más de potencia. Espero que esto se note y que nos ayude a estar un poco más arriba de donde hemos estado este año pasado, trabajaremos todo lo que haga falta para crecer, aunque creo que siempre habrá diferencias con las escuderías oficiales, que también han trabajado intensamente para afrontar la nueva campaña.

-¿Cómo analizas la parrilla de 2018, donde están todos los que peleaban el año pasado por las diez primeras posiciones, pero también otras figuras nuevas y de talento que debutarán en la categoría reina? ¿Luchar por el top 10 puede ser más complicado pese a los cambios en el reglamento?

-Creo que se va a apretar todo aún más. Es verdad que vienen pilotos muy buenos y muy rápidos, y con motos bastante buenas; creo que incluso va a estar más difícil estar este año en el top 10, que es nuestro objetivo, pero intentaremos hacer lo máximo que podamos y cumplir con los objetivos que tenemos. Pero sí es verdad que llegan pilotos como Toprak [Razgatlioglu], que tendrá una moto muy buena, Jacobsen también llegará con muchas ganas en su primer año en SBK, vienen Loris Baz, Yonny Hernández… una serie de pilotos que lo van a poner difícil, evidentemente ellos también querrán estar delante. Tendremos que luchar mucho esta temporada y estar en las mejores condiciones, tanto física como mentalmente, para poder hacerlo.