Ya se ha celebrado la primera carrera de la ronda portuguesa del WSBK. Vaya cómo está el circuito de Portimao… tremendamente bacheado. Es un circuito espectacular, pero el estado del asfalto es… no sé, las imágenes hablan por sí solas.

La parrilla, encabezada por Rea, tenía una ausencia notable, la de Tom Sykes, que en una caída espectacular se ha fracturado un dedo de su mano izquierda, así que no ha podido tomar parte en la salida. Acompañando a Rea estaban las Aprilias, con Lowes, Melandri y Torres en la segunda línea, este último haciendo un trabajo increíble en la SP1 que le permitió estar en la SP2 logrando esa posición.

Nada más darse la salida, Rea ha tomado una distancia de dos segundos, que ha ido incrementando a lo largo de la carrera. Tal ha sido la ventaja que ha sacado al resto, que le ha dado tiempo a escribir la carta a los reyes magos y a empezar a hacer la declaración de la renta para el año que viene… por aquello de ganar aún más tiempo. Davies intentaba adelantar a marchas forzadas para impedir que el de Kawasaki se distanciara, pero los esfuerzos resultaron inútiles.

Poco a poco las posiciones del pódium se han ido consolidando, con Melandri situado detrás de su compañero de equipo en la tercera posición. Por detrás, Laverty, Camier, Forés y Van der Mark luchaban por no perder la estela de un posible pódium. De ellos, Forés se fue quedando y Torres, con un pundonor digno de elogio, peleando con el resto de pilotos y con su propia moto, alcanzaba al grupo.

Una vez allí, una interesante pelea con Laverty que le costó varias vueltas y perder de vista a Van der Mark. Por su parte, otro de los espartanos de la categoría, Leon Camier, se acercaba cada vez más a Melandri, entrando a medio segundo escaso del italiano.

Así pues, victoria para Rea, con Davies y Melandri en el pódium. Cuarta posición para Leon Camier, seguido de Van der Mark y Torres terminando sexto. Forés y Ramos cerraban el top ten acabando noveno y décimo, respectivamente.