Una fuerte tromba de agua sorprendió a los pilotos de Supersport a mitad de la carrera del Campeonato del Mundo celebrada en Assen.

Hasta ese momento, Jacobsen, Sofuoglu y el campeón británico Luke Stapleford (quien debutaba con “su” Triumph tras abandonar el equipo PTR Honda) estaban luchando por la victoria.

Justo cuando se mostró la bandera roja debido a la intensa caída de agua, Jacobsen se iba al suelo, obligando a los técnicos de Honda a realizar un trabajo extra de cara a la nueva salida.

La reanudación, a seis vueltas, se convirtió en una locura, con Sofuoglu como protagonista estelar, luchando a su más puro estilo frente a su compañero Krummenacher (quien se fue recto en la chicane de entrada meta y se reincorporó en quinta posición), Jacobsen (que definitivamente quedó fuera de carrera tras otra caída), Kyle Smith y Gino Rea.

Al  turco le entró el sentido de la coherencia, optando por no seguir arriesgando sus opciones en una pista muy peligrosa, siendo adelantado por Smith y Rea.

Smith consiguió durante la última vuelta abrir un hueco respecto a Rea suficiente para llevarse su segunda victoria en el Campeonato del Mundo, con Sofuoglu cerrando el pódium y su compañero Krummenacher en cuarta posición, continuando como líder del campeonato.

Alex Baldolini terminó en quinta posición, mientras que Jules Cluzel no pudo puntuar al terminar 18º.

Nico Terol sumó tres puntos correspondientes a la 13ª plaza, mientras Nacho Calero fue 26º. Javier Orellana no pudo disputar la carrera debido a la fractura del radio de su brazo derecho.