Jorge Lorenzo se clasificó en tercera posición para la parrilla del Gran Premio de Australia que se celebra mañana en el circuito de Phillip Island.

Lorenzo, que atesora el récord de la pista australiana con un tiempo de 1’27.899, salió con determinación a luchar por la pole, aunque esta vez en última instancia, tratando de evitar tráfico en pista. Su primera vuelta lanzada (1’29.034) le valió para ser provisionalmente tercero en la tabla de tiempos.

Poco tiempo después se aventuró en su segunda incursión contra el crono. Esta vez, con un neumático trasero fresco, el español logró rebajar en un par de décimas su anterior registro pero el italiano Andrea Iannone, a su estela, le birló la segunda plaza por milésimas.

Con una última bala en la recámara, el mallorquín salió a falta de tres minutos a por su última tentativa. Lorenzo lo dio todo, llevándose de nuevo a su rueda a Iannone, y el empuje le valió para mejorar un poco más su tiempo (1’28.680). Pero el italiano de Ducati le volvió a arrebatar la segunda posición igualando su tiempo que, al menos, le sirvió para salvar su posición en primera línea.

Jorge Lorenzo:»Después del qualifying estaba un poco enfadado porque creo que mi posición real hoy era la segunda plaza si hubiera podido rodar solo, pero con mi rueda, Iannone, que aquí está rodando muy rápido y que usaba una goma superblanda, pudo mejorar mi tiempo. Y esto es importante porque normalmente siempre arranco más rápido que Márquez, pero mis salidas son muy parecidas o peores que las de Iannone, así que la primera vuelta mañana será difícil. Tendremos que tener paciencia y saber que la carrera será muy larga. Poco a poco intentaré luchar para estar delante y pelear con Márquez por la victoria, que es mi objetivo. Estoy contento con mis últimas tres vueltas pero no demasiado con la posición, aunque tampoco está tan mal mirándolo con perspectiva porque Vale está en tercera fila.»