Gran Premio de la Comunitat Valenciana: La rueda de prensa
Con el título en el bolsillo, Marc Márquez ha llegado a Valencia más relajado pero con un objetivo claro: Sumar la décimo tercera victoria del año. El ya doble campeón del mundo también espera que su hermano menor Alex pueda convertirse en el campeón del mundo de Moto3™ este fin de semana.
«Sólo hay que disfrutar de la última carrera de la temporada, aunque queremos terminar el año con una victoria delante de los aficionados” ha dicho el piloto del Repsol Honda. “Sabemos que los dos pilotos de Yamaha empujarán mucho, ya que lucharán por el segundo puesto del campeonato y también Dani, porque su nivel aquí siempre es muy alto».
Sobre cómo ha ayudado a su hermano para preparar el fin de semana, Márquez ha agregado: «Hemos hecho un poco de entrenamiento en pista de tierra para tratar de preparar la carrera, con algún contacto, pero estuvo bien. Quiero darle buena suerte, lo tiene todo en sus manos, sólo tiene que centrarse y seguir empujando como hasta ahora».
Rossi tiene como objetivo del fin de semana asegurarse el segundo puesto en la clasificación del Campeonato del Mundo 2014: «Ha sido una buena temporada, he mejorado mi velocidad y mis resultados. He disfrutado mucho haciendo buenas carreras y buenas batallas. Estoy peleando con Jorge para el segundo puesto y es importante porque es mi compañero de equipo».
Contestando a la pregunta de si está pilotando mejor que nunca en su carrera, el italiano del Movistar Yamaha MotoGP ha opinado: «Es diferente, pero es difícil decir si soy mejor. Me concentro mucho en los detalles, soy más viejo, pero me siento al 100%. El nivel de los rivales es más alto que nunca, las motos han cambiado mucho. Pero me encanta ir mejorando y seguir formando parte del juego».
Lorenzo, el otro candidato al subcampeonato ha señalado: «Estoy muy contento con mi segunda mitad de la temporada. Estamos en una buena forma, la moto está funcionando bien y no tenemos nada que perder este fin de semana. Vamos a tratar de ganar la carrera, pero no va a ser sencillo. Será difícil coger a Vale, pero no imposible».
Las aspiraciones de Pol Espargaró (Monster Yamaha Tech3) pasan por defender exitosamente su sexto puesto en la tabla general, y para ello debe firmar otro sólido resultado en la carrera del domingo. El de Granollers se rompió un metatarsiano del pie izquierdo en Sepang, pero está listo para la acción a pesar de que la lesión aún no está superada al 100%.
«Parecía más fácil de lo que fue!. Cuando estás en la moto y pruebas, sabes que estar en buenas posiciones no es lo más difícil, pero para quedar entre los primeros cinco o seis tienes que trabajar realmente duro. Hay que trabajar bien con la electrónica, con el anti-wheelie y con el equipo en el garaje. Este año ha sido de aprendizaje, he cometido errores, y ahora estoy listo para la última carrera, para hacer el test la próxima semana y volver a competir el año que viene».
Por su parte, Stefan Bradl se despide del equipo LCR Honda MotoGP este fin de semana después de tres temporadas. El próximo año pasará a pilotar para el NGM Forward Racing. El piloto germano ha reconocido: «Me gusta el ambiente que hemos tenido en estos tres años, así que será un poco triste, pero estoy deseando que llegue un nuevo reto con un nuevo equipo y una nueva moto. No estoy contento con la temporada en general y hemos tenido algunos momentos de mala suerte. Sachsening fue un desastre. En ocasiones las actuaciones no fueron tan buenas como podrían haber sido, pero hay que aprovechar la experiencia de esto y aprender para el futuro».
Para De Puniet, el Gran Premio de Valencia supone una oportunidad para regresar puntualmente a MotoGP. El francés, que competirá para el equipo Suzuki MotoGP como wild card, se ha mostrado ilusionado: «Estoy muy contento de estar aquí, para mí es como un premio tomar parte en esta carrera. Hemos trabajado mucho con la moto, así que sólo quiero disfrutar y hacerlo lo mejor posible y luego veremos qué pasa. Podría ser mi última carrera en MotoGP así que tenemos que disfrutar del momento porque nunca se sabe qué va a pasar en el futuro».