Álex Márquez: «Entrenar con mi hermano Marc es una motivación extra»
Álex Márquez se planteó como objetivo estar entre los diez primeros clasificados esta temporada, pero en las ocho primeras carreras del año ha demostrado que puede luchar con los del grupo de cabeza. El piloto Repsol se muestra contento por sus resultados en la primera mitad del Campeonato del Mundo de Moto3, teniendo en cuenta que es su primer año completo y que compite en algunos circuitos donde no ha rodado nunca.
Eres quinto en la general de Moto3 tras 8 carreras y últimamente siempre estás en el grupo de delante. ¿Te lo esperabas? ¿Qué balance haces?
«No me esperaba para nada estar tan cerca del grupo de delante. El objetivo de esta temporada era estar entre los diez primeros clasificados y al final, desde la primera cita, hemos podido competir por las primeras posiciones, a pesar de los resultados en Austin y Jerez. La verdad es que nos falta rematar un poco las carreras, pero podemos estar más que contentos por ser el primer año y por tratarse de circuitos nuevos para mí. Rodando contra estos rivales he aprendido muchas cosas que solo no hubiera aprendido. Ahora llegan circuitos que ya conozco pero no podemos relajarnos, debemos seguir con la misma mentalidad y continuar con esta línea de trabajo».
Has liderado carreras durante muchas vueltas, pero ¿qué te falta para lograr dar ese paso y subir al podio?
«Creo que el problema es que voy al límite durante toda la carrera. Tengo que tirar y tirar porque si no se me escapan, ya que no tengo un ritmo tan bueno como el suyo. En las últimas vueltas, que es cuando ellos aprietan y bajan los tiempos, me quedo un poco atrás y esto es lo que tenemos que intentar mejorar».
Eres de los nuevos en la categoría de Moto3. ¿Qué piloto te ha sorprendido más en la pista?
«Personalmente, me ha sorprendido Livio Loi, porque es su primer año y lo está haciendo muy bien. Es pequeñito y tiene que llevar lastre, por eso me recuerda a mi hermano cuando corría en el Campeonato de España. En la pista se percibe que tiene talento».
Salom, Viñales y Rins son los tres pilotos que se están jugando el campeonato. ¿Qué podrías decirnos de cada uno de ellos como piloto?
«De Luis Salom, como ya hemos visto, que está haciendo un gran año. Ha hecho un gran cambio de mentalidad y plantea muy bien cada Gran Premio, sacando ese medio segundo siempre al final de la carrera. En referencia a Álex [Rins], está haciendo una gran temporada, es su segundo año en Moto3 y todo apuntaba a que estaría en estos puestos. En los entrenamientos rueda muy fuerte y después en carrera lucha duro. En algunas se ha quedado a un paso de la victoria, le ha faltado rematar. Y, por lo que respecta a Maverick [Viñales], le está costando un poco en estas últimas carreras, pero siempre acaba luchando por la victoria. Lo más importante es que tiene claro que hay que ser regular y esto es muy importante«.
[pullquote]»En las últimas vueltas, que es cuando ellos aprietan y bajan los tiempos, me quedo un poco atrás y esto es lo que tenemos que intentar mejorar»[/pullquote]
Del resto de la temporada, sólo hay un circuito que todavía no conoces, el de Silverstone. ¿Qué podemos esperar de Álex Márquez?
«No lo sé, quizá me cuestan más que uno nuevo. Eso depende de cómo te entra el circuito. Tenemos que ir con la misma mentalidad: estar al cien por cien desde el primer entrenamiento. Si seguimos la línea que hemos llevado hasta ahora, tenemos opciones de estar delante con los más rápidos, pero supongo que conocer mínimamente el circuito nos va a ayudar. Tengo ganas de rodar en Indianápolis. El año pasado me gustó bastante el circuito, me divertí mucho encima de la moto y es a uno de los que me apetece volver».
¿Cómo es compartir equipo con Álex Rins?
«A mí me va bien tener un compañero de equipo que esté luchando por la victoria, porque compartimos datos y eso me ayuda a mejorar en los entrenamientos. Es muy importante aprender esto de cara al año que viene. La rivalidad va creciendo porque estamos los dos en el grupo de delante, pero nos llevamos bien».
El salto al Mundial implica un mayor reconocimiento mediático. ¿Has notado cambios respecto a eso?
«La gente se fija más en ti, pero como me pasaba en el CEV, cuando estás en el box o en la pista estás por lo que tienes que estar. Vas con la misma mentalidad. Fuera del circuito sí que tienes que saberlo llevar para que no se te suban los humos a la cabeza y seguir con los pies en el suelo. Estás en el Mundial y te piden fotos, entrevistas… y te acomodas. Sin embargo, cuando entras en los circuitos es cuando empieza la faena de verdad. Lo difícil es mantenerse y lo que quieres es ganar. El primer año está claro que no, pero después tu sueño y tu objetivo en un futuro es ganar un título y es para ello que has de trabajar y luchar siempre».
Te has pasado ya media vida en los circuitos. ¿Cómo es la vida de un chico de 17 años en el paddock?
«Estar aquí te quita cosas. No puedes hacer lo que hacen tus amigos. Se van de fiesta y tú no puedes ir porque tienes carrera o porque debes entrenar al día siguiente. Pero no me sabe mal porque esto es lo que me gusta y es a lo que estoy intentando dedicarme. Sé que tengo una responsabilidad, que cada día he de entrenar, que tengo carreras y que me tengo que preparar. La verdad es que lo llevo bastante bien».
[pullquote]»La verdad es que tener un hermano que está en MotoGP, que lleva 5 o 6 años en el Mundial y que se conoce muy bien los circuitos, es una ayuda enorme»[/pullquote]
Marc, además de hermano, ¿para ti es…?
«Es el piloto en el que me fijo más dentro de la pista. Aunque no fuese mi hermano, también sería así. Nuestro estilo de pilotaje se parece mucho; sacamos mucho el cuerpo y los codos. Es algo que en parte he aprendido de él. Con el cuerpo tienes que ayudarte a llevar la moto. Fuera de la pista es una ayuda muy grande para mí. Comentamos los entrenamientos juntos cuando nos vemos. La verdad es que tener un hermano que está en MotoGP, que lleva 5 o 6 años en el Mundial y que se conoce muy bien los circuitos, es una ayuda enorme».
¿Cómo es entrenar con un Bicampeón del Mundo?
«Para mí, es una motivación extra porque cuando le gano, es más satisfactorio. Alguna vez lo consigo, pero me cuesta. Me intento acercar al máximo y ponerle las cosas difíciles pero, al final, siempre saca algo de no sé dónde. Siempre que vamos a entrenar me fijo en él y, personalmente, ir a entrenar con alguien que va más rápido hace que me esfuerce más cada día, que no me acomode y que siempre intente mejorar. Él va muy fuerte en bici; la diferencia de edad se nota, pero me intento acercar igualmente. Dentro de tres años ya hablaremos…»
¿Ves en directo todos sus entrenamientos y carreras?
«Algunos entrenamientos no los veo porque, al ser los primeros, tenemos mucho trabajo durante el día y no los puedo ver. Siempre que tengo unos minutos libres, miro para ver cómo va. Los míos sí que los veo grabados, pero los suyos no me da tiempo. Los entrenamientos cronometrados y las carreras sí que las veo todas, siempre».
¿Y se sufre mucho viéndolo?
«Cuando estás en un fin de semana en el que tú también compites lo has de saber llevar porque, si sufres mucho, es cansado, ya que parece que sea una carrera o un entrenamiento que hayas hecho tú. He de saber calmarme porque después me toca a mí».
En el casco llevas a un vaquero sobre una moto. ¿Qué significado tiene?
«Esto viene porque un día en Norteamérica, donde hay centros donde se puede practicar con armas, fuimos, lo probé y se me dio muy bien. Aquel día me apodaron el Pistolas y por eso puse este cowboy que me diseñaron».