Pablo López consiguió la octava plaza en la tercera ronda del Campeonato de España de Supermotard en un fin de semana que se complicó desde el primer momento.

El cántabro, que acudía a la cita de Samper de Calanda con muchas ganas tras los buenos resultados de los test de la semana previa, sufrió el primer revés nada más llegar.

Una gastroenteritis le dejaba muy mermado físicamente y, con el tiempo justo, disputó los entrenamientos oficiales, consiguiendo una meritoria décima posición en la parrilla de salida.

Ya el domingo, una caída en el warm up fue el preludio de una serie de contratiempos que lastrarían al piloto de Requejada durante el resto de la jornada.

En los instantes previos a la salida, Pablo quiso recordar a Adrián Aparicio, joven piloto cántabro fallecido durante una prueba de motocross la semana pasada.

Problemas en el freno y en el embrague de su moto condicionaron su actuación durante las tres mangas disputadas, en las que sufrió otra caída durante la primera carrera.

López pudo terminar las mangas en décima, sexta y octava posición, siendo finalmente octavo en el global de la prueba.

Pablo López: “Ha sido un fin de semana malo. No estaba físicamente al 100% y luego tuve problemas mecánicos que me impidieron hacer buenos resultados cuando luchaba por las posiciones delanteras. Ahora tenemos tiempo para recuperarnos físicamente y seguir entrenando para la próxima carrera, en la que espero conseguir un buen resultado.”