Libero Liberati , “El caballero de acero”, nació en Terni (Italia) el 20 de Septiembre de 1926, falleciendo, también en la misma localidad, el 5 de Marzo de 1962.

Comenzó trabajando en un taller mecánico y, después de la II Guerra Mundial, comienza a competir en campeonatos nacionales, ganando cuatro carreras en el 47 y en el 48, una en el 49 y dos victorias por temporada en los años 51, 52, 53 y 54.

Vence el Campeonato Italiano de 500cc consecutivamente en el año 1955 y en el 1956 con Gilera.

En 1950, participa por primera vez en el Campeonato del Mundo a los mandos de una Moto Guzzi, aunque es con Gilera y su modelo más emblemático y multicampeón de los años 50, La Saturno, con la que consigue sus resultados más destacados.

En el Mundial le cuesta hacerse un hueco en la clase reina, dominada con mano de hierro por Geoff Duke, aunque en su “campeonato doméstico”, es bicampeón en el 55 y 56.

No obstante, llega su gran momento en el año 1957, gracias a una serie espectacular de victorias, nada menos que cuatro de seis carreras disputadas en el Mundial de aquel año.

Durante esa temporada se da un hecho curioso: gana el Gran Premio de Bélgica en el mítico circuito de Spa, pero los comisarios le despojan de la victoria alegando irregularidades en su moto, dando por vencedor del Gran Premio a Jack Brett.

Tuvo que esperar hasta el año 1958, para que le rehabilitasen su victoria en aquel Gran Premio.

En 1957, es “víctima” del pacto de abandono del mundial de tres grandes marcas italianas, Moto Guzzi, Gilera y FB Mondial, que le dejan fuera de la temporada al no encontrar una máquina con la que disputarle con plenas garantías.

Desde ese año y hasta 1962, corre en distintas carreras tanto en Italia como en Sudamérica hasta llegar a un fatídico día:

5 de marzo de 1962, Liberati vuelve junto a Gilera a la alta competición, y en unos entrenos en la Carrera 209 Valnerina, con el asfalto completamente mojado, cae en la curva de Cervara, chocando violentamente contra una pared de roca. Nada se pudo hacer por su vida.

Liberati, también llamado “El Caballero de Acero”, dado su origen en Terni, ciudad conocida por la producción de dicho material y gran rival de Geof Duke, al que, curiosamente, también llamaban “El Duke de Acero”, dejaba tras de sí una vida plagada de éxitos deportivos y constante lucha por medirse con los pilotos más rápidos del Mundo.